Por: Aimée Boeta
Este año Ecuador celebra sus elecciones presidenciales, la primera vuelta fue el 7 de febrero del 2021, de los 16 candidatos que se presentaron en las urnas ahora sólo quedan dos que competirán por la presidencia de Ecuador en la segunda vuelta.
Los contendientes finales son Andrés Arauz candidato correísta de la Unión por la Esperanza, que recibió el 32.7% de los votos en la primera vuelta y Guillermo Lasso de la alianza CREO-PSC que obtuvo el 19.74%.
Andrés David Arauz Galarza nació en Quito en 1985, estudió en el Colegio de Quito, uno de los más importantes del país, tiene estudios en economía y matemáticas por la Universidad de Michigan. El candidato a la presidencia además cuenta con una maestría en economía del desarrollo por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) de Quito, al igual que un doctorado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
Arauz llegó a considerar a Rafael Correa como vicepresidente, sin embargo, debido a la condena por corrupción del exmandatario, eligió a Andrés Rabascall como vicepresidente. Sus propuestas buscan transparentar el uso de fondos públicos, aumentar la confianza de la población y la creación de una Comisión de la Verdad para revisar los casos de violación a los derechos humanos. Además, plantea fortalecer el Sistema de Educación Intercultural Bilingüe, implementar una reforma tributara donde paguen más los ricos y crear mecanismos para evitar la fuga de dólares del país.
Por su parte, Guillermo Lasso nació en 1955 en Guayaquil, a pesar de no contar con estudios universitarios logró convertirse en un banquero prolífico al ingresar a la Bolsa de Valores de Guayaquil. En 1994 fungió como director ejecutivo del Banco Guayaquil, se retiró del mundo bursátil en 2012. En 2017 con el partido Creando Oportunidades (Creo) y el Partido Social Cristiano decidió presentarse como contendiente a Lanín Moreno, volviéndose un fuerte opositor del correísmo.
En estas elecciones, Guillermo Lasso eligió como vicepresidente a Alfredo Borrero, juntos buscan regresar a la derecha al poder. El candidato ha propuesto delegar la administración de los hospitales al sector privado, un acceso más rápido al seguro de desempleo, reducir los gastos del gobierno, eliminar el impuesto a la salida de divisas, aumentar la producción de petróleo y diversificar las formas de contratación a los trabajadores, para así incentivar el empleo.
Ambos candidatos se enfrentaron en un debate presidencial el 21 de marzo, aunque se esperaba que explicaran sus propuestas de forma más detallada, los candidatos se dedicaron a lanzarse acusaciones durante todo el evento.
En vez de profundizar sobre cómo combatirían la corrupción, su plan de salud frente al Covid-19, la violencia, los motines carcelarios que ha sufrido Ecuador en los últimos días. Tanto Lasso como Arauz decidieron atacarse a nivel personal.
Lasso acusó a Arauz de querer provocar una crisis económica al poner en cuarentena los dólares y ser un títere de Rafael Correa. Mientras que Arauz lo señaló como un banquero que había comprado a Lenin Moreno para cumplir su voluntad.
Sus constantes ataques en vez de ayudar a los ciudadanos indecisos sirvieron para polarizar aún más a la población que tendrá que elegir el 11 de abril en las urnas quién quiere que gobierne Ecuador dentro de los próximos cuatro años.
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