Retornos: El Parque de Santa María la Ribera antes de Ómicron

Por: Rubén Méndez Torres

Retornos es un proyecto que recorre algunos de los muchos lugares de la Ciudad de México; aquellos que están regresando a sus actividades pausadas por la pandemia de COVID-19. Busca poder capturar algunos de los momentos, actores y actrices de la nueva vida, la normalidad acaecida por esta pandemia y el cómo los sitios vuelven a ser apropiados. En esta ocasión el proyecto tiene un giro radical, ya que nos enfrentamos a una nueva ola de contagios, enaltecida por la variante Ómicron; por lo que volvemos a resguardar algunos de los sitios con mayor afluencia de personas. No obstante, antes de que esta situación sucediera, visité a principios de diciembre uno de los espacios más emblemáticos del corazón de la Ciudad, se trata del Parque de Santa María la Ribera. 

Sin duda este sitio es uno de los más destacados de la imagen de la CDMX. El Kiosco Morisco es uno de los emblemas del Parque; muy conocido por su belleza arquitectura, diseño y color. Colocado en 1910, ha sido un referente de la cultura local, que convoca a la danza, la música, las artes escénicas y plásticas a rodearle con sus exposiciones. Es un espacio que posibilita que personas de diversas edades convivan en una algarabía de juegos, pasos de baile, sutiles caminatas o bellos romances.

Personalmente, este Parque es símbolo de recuerdos, momentos cálidos y cuna de diferentes proyectos. Mi café favorito de la Ciudad de México se encuentra a las orillas, por lo que venir a visitarlo siempre resulta en un día especial. Antes de que nuevamente la ola de contagios aumentará, pude ser testigo de cómo las personas residentes volvían a hacer suyo la inmensidad del Parque. Trayendo nuevamente la música, con los danzones, salsas y cumbias que suele haber especialmente los domingos, para que toda aquella persona que camine se deleite, o si se va con compañía, sacar los mejores pasos de baile posible.  

Se están tomando medidas de prevención, para mitigar los estragos de la pandemia. Es por ello que en estos días han disminuido las visitas al Parque. Esperemos que no lo vuelvan a cerrar como sucedió en 2020, ya que es un lugar al aire libre con excelente ventilación. Sólo se trata de cuidarse y tal vez disminuir la actividad que se estaba retomando. No obstante, a pesar de toda esta situación, el Parque y el Kiosco Morisco siguen siendo una maravilla a la hora de contemplar y meditar pensamientos, mientras tomamos un delicioso café y una crujiente chapata. 

Esta segunda entrega de la Colección Retornos está conformada por siete fotografías (seis verticales y una horizontal). Se aprovechó la iluminación natural del sol a media tarde. Sensibilidad ISO 50 – 100 – 200. Tamaños aproximados de 1 MB (1800 x 2000). Se aplicó un filtro a blanco y negro, contraste y saturación media en edición.

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