Por: Rubén Méndez Torres
Antes de la pandemia por COVID-19, se escuchaba en los noticieros hablar de diversas enfermedades que afectaban más a continentes como África o Asia. Tal fue el caso del Ebola, que afectó gravemente a la población africana. No obstante, la preocupación por estas enfermedades se veía limitada a las condiciones geográficas de esos países. No fue hasta que el coronavirus conocido como SARS-CoV-2 nos demostró que no hay barreras que impidan la propagación de las enfermedades en el mundo.
Recientemente, ha resonado una enfermedad que, aunque no sea un virus nuevo, pareciera ser una alarma fuerte. Lo anterior, no por el hecho de ser una nueva pandemia, sino por los estragos de preocupación que tiene la población mundial por las enfermedades, después de lo ocurrido por el COVID-19. Se trata de la viruela símica, también conocida como la viruela del mono.
La Organización Mundial de la Salud[1] ha dado a conocer especificaciones para poder comprender de qué se trata esta enfermedad. La viruela símica es una zoonosis vírica, es decir, es provocada por un virus transmitido de los animales a las personas, no obstante, una vez que una persona la adquiere se convierte en medio de contagio. Dicha cepa causa síntomas muy similares a la viruela observada en el pasado, aunque menos graves. Se presenta principalmente en África central y occidental, aunque su presencia está aumentando en zonas fuera de la región.
El listado de síntomas que menciona la OMS a través del portal de noticias de la ONU[2], son: fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, dolor de espalda, poca energía, ganglios linfáticos inflamados y erupciones o lesiones en la piel. Los síntomas suelen durar entre dos y cuatro semanas y desaparecen por sí solos sin tratamiento. Éstos pueden ser similares a otras enfermedades, por lo que se recomienda la pronta asistencia a una institución de salud, para descartar que no se trate de varicela, sarampión, alguna infección bacteriana de la piel, sarna, sífilis o alergia a algún medicamento. Para ello, además de la revisión de la piel y síntomas, son necesarios análisis especializados de laboratorio.
La revisión pronta es de vital importancia, porque, aunque en la mayoría de los casos, los síntomas de la viruela desaparecen por sí solos en unas pocas semanas, en algunas personas pueden provocar complicaciones médicas e incluso la muerte. Los recién nacidos, los niños y las personas con inmunodeficiencias pueden correr el riesgo de sufrir síntomas más graves y morir por la enfermedad[3].
Como tal, la viruela común fue una de las primeras enfermedades de alto contagio en ser controlada y casi erradicada, gracias al desarrollo de la vacunación para su prevención, por lo que estar vacunados contra ella, nos protege en parte de esta variante, sin embargo, no descarta el contagio. Lo distinto que tiene este virus, a diferencia del que provoca COVID-19, es que su forma de contagio es por contacto con alguna persona que tenga la evidente enfermedad, por lo que permite mantener precauciones; el COVID-19, por un lado, se esparce por permanencia en el aire de partículas infecciosas provenientes de la saliva. Esto descarta un contagio masivo y rápido como lo fue la pandemia pasada; sin embargo, cada vez son más países que presentan estos casos, como se muestra en la siguiente tabla.
En el caso de México, el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, comunicó a través de su cuenta de Twitter, que se había presentado el primer caso de este virus en el país.
Afortunadamente, también menciona que el paciente se encuentra estable y en aislamiento preventivo. Esperando que se recupere sin complicaciones.
Esta enfermedad no es nueva, y no presenta aspectos de contagio masivo con alarma de crecer a una pandemia. Se propaga lento y en condiciones muy precisas, por lo que aunque no represente una alarma grave como en su momento lo fue el COVID-19 es importante cuidarse, con precauciones básicas de salud y manteniéndose informados. Ante cualquier sospecha, acudir inmediatamente a un centro de salud o institución médica para su revisión.
[1] Organización Mundial de la Salud, Viruela símica, [en línea], 31 may. 2022.
[2] Organización de las Naciones Unidas, La viruela del mono: qué es, cómo se contagia, quién está en riesgo y cómo protegerse, [en línea], 31 may. 2022.
[3] Idem.
Lista de referencias
Organización de las Naciones Unidas, La viruela del mono: qué es, cómo se contagia, quién está en riesgo y cómo protegerse, [en línea], consultado en: https://news.un.org/es/story/2022/05/1509252 31 may. 2022.
Organización Mundial de la Salud, Viruela símica, [en línea], consultado en: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/monkeypox 31 may. 2022.
remji-fractales.com 