El cerro Cuatlapanga, una experiencia física llena de historia y cultura

Por: Estefany Romero

El Cuatlapanga es un cerro que se encuentra frente a la Malinche, su nombre significa “Cabeza Partida” en náhuatl, tiene una altura de 2900 metros sobre el nivel del mar y se localiza en el estado de Tlaxcala, específicamente entre los municipios de San José Teacalco y San Antonio Cuaxomulco. Este cerro es considerado guardián y protector de las personas que habitan la región 

En la presente reseña, se abordarán algunos aspectos relacionados con este emblemático cerro, en primera instancia, se habla de la experiencia de escalarlo y posteriormente historias del Cuatlapanga leídas del texto “Revitalización de historias y leyendas de la cultura tlaxcalteca en la región aledaña al cerro Cuatlapanga” escrito por el Ing. Carlos Pacheco Montiel, la Ing. Anayeli Oreal Pelcastre y la M.C. Dulce Hernandez Decasa. Estos dos elementos son relevantes de conocer porque en ocasiones desconocemos lo que representa un cerro para las comunidades.

Experiencia de escalarlo

A Cuatlapanga se puede llegar en transporte público o en carro particular, es de fácil acceso, pero en caso de no conocer, las personas nativas pueden orientar a la gente, o las herramientas digitales pueden guiarlos. Al llegar, las personas que viajan en transporte privado, pueden estacionarse al pie del cerro para comenzar el ascenso

Iniciando el ascenso hay una iglesia de la Virgen de Guadalupe al pie de Cuatlapanga  y más adelante se encuentra el parque Cuatlapanga Jurassic, un espacio ecoturístico donde se instalaron figuras de tamaño casi real de dinosaurios.

El gobierno municipal pretendía que el lugar fuera un detonante en la economía de la zona luego que suspendieran el mirador durante la pandemia. Sin embargo, hoy en día los visitantes solo tienen acceso al cerro, pero no pueden acercarse o tomarse fotografías con las figuras, entre las causas de la clausura está:  el daño ambiental,  por la afectación a la flora y fauna del lugar, por la modificación del uso del sueldo y la falta de permiso.

Al llegar a  la cima hay un monumento de la imagen católica de Cristo Rey y más adelante está el mirador al cual ya se puede acceder, mismo que fue suspendido durante la pandemia en donde se ha instalado un banca, desde la cual se pueden tomar fotos de uno mismo en la cima o del paisaje, como la  vista  frente a la Malinche y el valle de Tlaxcala , sin duda alguna se pueden realizar las mejores tomas.

Para llegar a este punto, se necesita avanzar durante aproximadamente una hora, dependiendo de la condición física de cada persona, no considero que sea un lugar al que resulte difícil subir o bajar, pues toma aproximadamente una hora en cada fase, el cerro es un lugar en donde se puede practicar senderismo y que incluso para algunas personas les sirve de práctica antes de ascender a la Malinche.

El camino es un sendero muy marcado, conforme se va avanzando se encuentran 14 capillas, las cuales permiten a las personas ubicarse en el espacio. Se cuenta que las personas pueden recoger una  piedra antes de cada capilla y realizar una suerte de limpia con dicha piedra para dejar el cansancio en ella y arrojarla a un lado de la capilla, repitiendo el proceso de manera sucesiva en cada una de ellas. 

Historias del Cuatlapanga

Existen varias historias del Cuatlapanga las cuales fueron plasmadas en el texto “Revitalización de historias y leyendas de la cultura tlaxcalteca en la región a aledaña al cerro Cuatlapanga”, cada historia es muy importante porque se han contado de generación en generación, sin embargo, sólo mencionaré de manera breve dos.

La primera historia es la leyenda del “Guerrero Cuatlapanga” que dice que hace cientos de años en Tlaxcala vivía un joven guerrero llamado Cuatlapanga, quien se dice que estaba muy enamorado de una hermosa doncella de nombre  Malintzi. Él deseaba casarse con ella, sin embargo, fue reclutado para combatir contra  los guerreros Aztecas, entonces acordaron que cuando regresará se casarían. Pero cuando regresó su amada había muerto. Los dioses lo vieron llorar y se apiadaron de él, por lo cual lo convirtieron en piedra a la lado de la tumba de Malintzi, es por eso que se puede ver al pie de la Malinche al Cuatlapanga gritando de dolor con la boca abierta. 

La segunda historia es acerca del Cristo Rey, que como se mencionó anteriormente se encuentra en la cima del Cuatlapanga. El sendero representa un valor religioso, pues las 14 capillas representan el Vía Crucis que sirven de descanso para recordar las estaciones y donde colocan una piedra que hace referencia a la penitencia. El padre Marcial Águila Gonzales estableció esta costumbre el 17 de julio de 1933, cuando convocó a los católicos del Estado al templo de San Antonio Cuaxomulco, iniciando la procesión en la madrugada y ya en la cima el sacerdote dio la bendición y consagró a la imagen católica de Cristo Rey.

En suma, el cerro Cuatlapanga nos permite conectar con la naturaleza y con su cultura a través de las  historias narradas por la comunidad aledañas  que se han comunicado de generación en generación. Por lo tanto, como en todo espacio natural y cultural, es importante mencionar el cuidado y respeto, por último, quiero sugerir prestar atención en las actitudes negativas que podemos tener como seres humanos para la naturaleza y en la medida de lo posible, participar en actividades en pro la preservación de los cerros y montañas. 

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