Breves notas sobre la teoría schumpeteriana de la crisis económica

Por: Alan Pérez

El presente texto lleva a cabo algunos apuntes acerca de la teoría schumpeteriana[1] de las crisis económicas, es decir, de las fluctuaciones recurrentes del sistema capitalista. En este sentido, el autor se pregunta acerca de la causa económica que subyace a los auges y las depresiones de la actividad productiva en el desenvolvimiento capitalista. Así pues, la hipótesis que defiende dicho autor es que los ciclos económicos se explican por la aparición abrupta, discontinua y desigual de las innovaciones tecnológicas, es decir, del conjunto de nuevas combinaciones de factores y recursos productivos en el sistema capitalista[2].

          Según este autor, las crisis son variables, puesto que solamente comparten un rasgo común, a saber, que se caracterizan por ser una perturbación en el sistema del valor; y aquellas son, además, heterogéneas, lo que no excluye el hecho de que existan crisis puramente económicas en tanto que estas se explican por la dinámica misma del sistema capitalista[3].

Fuente: irwincollier.com

Joseph Schumpeter señala que el estudio de las crisis económicas implica una diferenciación analítica clave, a saber, aquella que existe entre el flujo cuantitativo del valor y el cambio cualitativo de la producción[4]. El primero se define como un estado equilibrado de la producción de valor que se basa en una multiplicidad de recursos y factores habituales, mientras que el segundo se entiende como una transformación desequilibrada de la producción que es el resultado de nuevas combinaciones de factores y recursos productivos en una economía específica[5]. Según este autor, tales nuevas combinaciones se suscitan en una variedad de dimensiones de la economía capitalista, que van desde el bien o servicio producido, pasando por los métodos, las técnicas y los insumos de producción, hasta el tipo de dinámica y el modo de organización de la actividad empresarial[6].

          Ahora bien, la introducción de tales innovaciones en el proceso productivo es efectuada por un conjunto de “emprendedores”, los que poseen una multiplicidad de cualidades como el liderazgo, la creatividad, la valentía, etcétera[7]. Antes que el deseo de acumulación de dinero o riqueza, tales personajes buscan el reconocimiento social o, mejor, el estatus simbólico que lleva aparejada la invención, innovación y difusión de productos tecnocientíficos[8]. Como sea, los emprendedores siempre aparecen “en grupo y por rachas”, ya que la introyección de innovaciones en el proceso productivo implica la obtención de una ganancia extraordinaria en relación con el resto de la industria, lo que impulsa a los demás empresarios a la asimilación o adopción de dichas innovaciones con miras a mejorar su capacidad de competencia en el mercado hasta el punto en que se elimina cualquier tipo de ganancia extraordinaria[9].

Fuente: unebook.es

Así, Schumpeter sostiene que la emergencia de tales innovaciones por parte de los emprendedores capitalistas, así como el proceso de adaptación de las mismas en otras industrias “explica fácil y necesariamente los factores fundamentales de la expansión [y, a su vez, de la contracción del sistema capitalista].”[10] En el caso de la expansión, el proceso se suscita de la siguiente manera: primero, se introducen nuevas combinaciones de factores y recursos productivos por parte de los emprendedores; segundo, se incrementa la rentabilidad y, por lo tanto, la ganancia en las empresas a las que pertenecen dichos emprendedores; tercero, se genera un aumento de la inversión de capitales en estas industrias, las que son generadoras de medios de producción; cuarto, el incremento de la demanda en este sector de la economía produce un aumento del poder adquisitivo de estas empresas, lo que causa el incremento del nivel de precios en estas industrias, en particular, y en la economía, en general; quinto, se contrae el desempleo y, por lo tanto, aumenta el salario real en tales industrias, al mismo tiempo que baja el tipo de interés; y, sexto, se expande el comercio y el crédito en el resto de la economía por el aumento del poder adquisitivo y de la demanda de estas industrias, lo que provoca una alza de la prosperidad en todo el sistema económico. En el caso de la contracción, el proceso es el inverso, el que se suscita por la imitación de tales innovaciones en el resto de los sectores productivos, lo que implica la caída de la rentabilidad y, por ende, de la ganancia en el sistema capitalista, así como el conjunto de fenómenos subsiguientes[11].

Por lo tanto, el autor mencionado indica que las ganancias generadas por la creación de nuevas combinaciones de factores y recursos productivos tiene como resultado la creación de un conjunto de nuevas empresas cuya función es la de sustituir a las ya existentes, lo cual provoca una reconfiguración de la estructura industrial y, por lo tanto, una situación de desequilibrio en el sistema económico que conduce, con el tiempo, a un nuevo punto en el que la producción de valor se lleva a cabo a través de productos y técnicas habituales, es decir, a un estado de equilibrio en el que se rutiniza y homologa lo que antes fuera una innovación. De ahí que Joseph Schumpeter acuñara el concepto de destrucción creativa para describir el desenvolvimiento del sistema capitalista, el cual se sustenta en el entrelazamiento existente entre las situaciones de equilibrio y armonía en las que la producción del valor se genera a través de métodos y técnicas rutinarias y homogéneas y los estados de desequilibrio y disarmonía en los que se transforma la producción a partir de procedimientos y tecnologías innovadoras y heterogéneas[12].

Fuente: significados.com

En suma, la teoría schumpeteriana de las crisis económicas explica los movimientos alternativos entre prosperidad y depresión del capitalismo por la aparición y asimilación masiva de nuevas combinaciones de factores y recursos productivos por medio de la actividad inventiva de un conjunto de emprendedores capitalistas. Sin embargo, tal teoría no ha estado exenta de críticas, las que van desde la inexistencia de una causalidad lineal entre el desenvolvimiento del capitalismo y la innovación tecnológica, pasando por la ausencia de una explicación sobre el modo en que se crean y se difunden las innovaciones tecnocientíficas, hasta la visión apologética, individualista y romántica de la figura del emprendedor capitalista.


[1] Joseph Schumpeter, nacido en Moravia, República Checa, en 1883 y fallecido en Salisbury, Estados Unidos, en 1950, fue un importante economista discípulo de la Escuela Austríaca de Economía, cuyos principales representantes fueron Eugen Bohm-Bawerk, Friedrich Wieser y Léon Walras. Schumpeter destacó por sus trabajos sobre el ciclo económico, la actividad empresarial y las innovaciones tecnológicas, cuya máxima aportación a nivel teórico fue el concepto de destrucción creativa para describir los procesos de expansión y contracción de la actividad económica en relación con la aparición y la asimilación de nuevas combinación de recursos y factores productivos en el sistema capitalista. Algunas de las obras más destacadas del autor son Teoría del desenvolvimiento económico (1911), Ciclos económicos: análisis teórico, histórico y estadístico del proceso capitalista (1939), Capitalismo, socialismo y democracia (1942) e Historia del análisis económico (1954).

[2] Schumpeter, Joseph, Teoría del desenvolvimiento económico, 1967, pp. 223-224. El trabajo schumpeteriano es una crítica directa a las teorías de las crisis tanto de la desproporcionalidad entre los sectores productivos (es decir, del subconsumo o de la sobreproducción), puesto que tales fenómenos no son sino el efecto (y no la causa) de las nuevas combinaciones de factores y recursos productivos en el sistema capitalista; como de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia, ya que las variaciones en la ganancia dependen de la introducción de innovaciones en el sistema capitalista (y no a la inversa). [Ibídem, pp. 225 y 229].

[3] Ibídem, pp. 219-223. Ahora bien, las crisis se diferencian una de las otras por la naturaleza causal de las mismas. Por lo anterior, la causa endógena de la crisis económica se relaciona con las nuevas combinaciones de factores y recursos productivos en una economía determinada. En consecuencia, una crisis económica no es sino el movimiento ondulatorio de prosperidad y depresión que generan las innovaciones tecnológicas en el sistema capitalista. [Ibídem, pp. 223-224].

[4] Ibídem, pp. 217-218.

[5] Bustelo, Pablo, “Capítulo. 6. Schumpeter: el optimismo”, en Teorías contemporáneas del desarrollo económico, 1999, pp. 73-74.

[6] Schumpeter, Joseph, op. cit., pp. 218-219.

[7] Ibídem, pp. 228-229.

[8] Quevedo, Luis, “Aproximación crítica a la teoría económica propuesta por Schumpeter”, [en línea], en Revista Investigación y Negocios, 2019, pp. 56-57.

[9] Schumpeter, Joseph, op. cit., pp. 227-229.

[10] Ibídem, pp. 229-230.

[11] Ibídem, pp. 230-234.

[12] Ibídem, pp. 228-234; y Oyala, Alejandro, “Economía de la innovación y del cambio tecnológico: una aproximación teórica desde el pensamiento schumpeteriano”, [en línea], en Revista Ciencias Estratégicas, 2008, pp. 240-245.


Referencias bibliográficas

  1. Olaya, Alejandro, “Economía de la innovación y del cambio tecnológico: una aproximación teórica desde el pensamiento schumpeteriano”, [en línea], en Revista Ciencias Estratégicas, Universidad Pontificia Bolivariana, no. 20, vol. 16, 2008, pp. 237-246, consultado en: https://www.redalyc.org/pdf/1513/151312829002.pdf.
  2. Bustelo, Pablo, “Capítulo. 6. Schumpeter: el optimismo”, en Teorías contemporáneas del desarrollo económico, 1a edición, Editorial Síntesis, España, 1999.
  3. Quevedo, Luis, “Aproximación crítica a la teoría económica propuesta por Schumpeter”, [en línea], en Revista Investigación y Negocios, Universidad Mayor Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca, no. 20, vol. 12, 2019, pp. 55-60, consultado en: http://www.scielo.org.bo/pdf/riyn/v12n20/v12n20_a06.pdf.
  4. Schumpeter, J. (1967). Capítulo VI. El ciclo económico. En Teoría del desenvolvimiento económico. México: Fondo de Cultura Económica.

Un comentario en “Breves notas sobre la teoría schumpeteriana de la crisis económica

Deja un comentario